Para que un niño tenga un crecimiento en el desarrollo sano, deberá superar etapas hasta llegar a la edad adulta. A veces, surgen situaciones a lo largo de ellas que pueden entorpecer su desarrollo, provocando así, problemas de conducta, nerviosismo, hiperactividad, depresión, etc. Un tratamiento por parte de una psicólogo infantil puede sentar las bases para evitar problemas en la edad adulta.
Cada niño tiene una forma única de relacionarse consigo mismo y con los que le rodean. Por ello las necesidades varían así como las maneras de abordar los problemas que se puedan presentar.
En Izaera Psicología, desde un enfoque integrador ofrecemos una atención personalizada para cada caso. Te orientamos en la educación de tu hijo/a, en la adaptación de nuevas situaciones que se puedan dar dentro de la familia (divorcio, duelo… ), en el colegio, con amigos.